El conocimiento de los signos zodiacales es una herramienta muy valiosa si aprendes a utilizarla en tu beneficio y las ventajas que puede reportarte son múltiples. En primer lugar te permite indagar en las cualidades de personalidad de quienes te rodean así como también en las propias. Y en segundo lugar, ese conocimiento te ayudará a mejorar tus relaciones en todos los planos.
Cada signo tiene su personalidad y sus complejidades: Defectos virtudes, deseos encontrados y algunas confusiones recurrentes. Y Sagitario, por más seguro y determinado que parezca, no es la excepción.
Conociendo más a Sagitario
Si una sensación dan los nativos de Sagitario al conocerlos es la de saber muy bien lo que desean y cómo conseguirlo. Sin embargo, su personalidad encierra como todas sus dudas y contradicciones. Veamos a qué nos referimos:
- Sagitario es un signo del zodiaco que lleva dentro de sí mismo aventura y una gran resistencia a las situaciones adversas. Una gran cualidad para encontrar nuevas experiencias y experimentar lo que el mundo nos tiene que ofrecer. Sin embargo, esta misma característica puede llegar a hacer que una persona se adentre mucho en un terreno que no conocía y se pierda dentro del mismo.
- Su gran resistencia a la adversidad lo hace capaz de entrar en estos nuevos terrenos y su mentalidad positiva que busca nuevas aventuras le permite adentrarse cada vez más. Es solo hasta que es muy tarde que se da cuenta que una experiencia, por ser nueva, no siempre es buena; y que se ha adentrado tanto que no tiene la fuerza para regresar y volver a la seguridad de su vida. El deseo de escapar de Sagitario entonces aparece.
Existen situaciones en la vida que nos cambian para bien o para mal y de las que no nos es fácil escapar y estas nos condicionan cuando nosotros mismos nos aventuramos desprevenidamente en ellas, sin medir las consecuencias de nuestros actos. Y Sagitario actúa en forma recurrente sin pensar en las consecuencias y se da cuenta de sus errores cuando ya es muy tarde para repararlos.
Paradojas sagitarianas
Muchas veces Sagitario hace caso omiso de sus errores porque sabe que ha sido por él mismo que ha quedado atrapado en este momento: Relaciones amorosas, nuevos trabajos o grandes proyectos, son ejemplos de las situaciones que nos pueden llegar a atrapar en ocasiones y de las cuales no es fácil escapar. Paradoja número uno: En pos de su libertad, Sagitario es a menudo preso de sus propios actos.
En estos momentos difíciles, cuando el trabajo pesa en el alma más de lo que se puede cargar, cuando los sentimientos amorosos por otra persona aplastan las necesidades individuales, o cuando se comprometen con la sociedad a dar más de lo que se tiene; el espíritu de una persona puede verse seriamente herido. Son en estos momentos difíciles cuando Sagitario necesita la ayuda de las personas a su alrededor.
Aunque no lo asuma, a menudo Sagitario necesita que aquellos que le quieren, le apoyen para que pueda salir de estas situaciones. Como una misión de rescate se debe asistir a estas personas. No dejar que el trabajo los consuma, o que sufran por amar a la persona equivocada, o que su compromiso destruya su identidad personal. Debemos responder, porque de lo contrario, Sagitario caerá en hábitos de autodestrucción. Paradoja número dos: Sagitario se empeña en mostrarse todo poderoso e independiente y con frecuencia necesita más contención que nadie.
Si no se le ayuda y muestra el apoyo durante estas situaciones difíciles cuando muestran un gran deseo de escapar, las personas de Sagitario con frecuencia recurren a hábitos que los destruyen por dentro. Alcohol, fiestas, sustancias; son solo algunos de los ejemplos en los que pueden caer las personas de este signo cuando la realidad los sobrepasa. Para intentar escapar por sí mismos cuando no tienen nadie que los ayude. Paradoja número tres: Sagitario se jacta de su gran amor por sí mismo y a menudo se lastima más que nadie.
Quienes tenemos un vínculo de afecto con los sagitarianos debemos encontrar la forma para ayudarles a cargar el enorme peso que a menudo amenaza con aplastarlos, aun si esto significa un gran esfuerzo para nosotros. Porque solo cuando les ayudemos a superar esta etapa es cuando podremos ver de nuevo ese gran espíritu que fue golpeado y abatido, de lo contrario, se podría perder para siempre y nunca volver a brillar.